De acuerdo a la información suministrada por Fiscalía, el cuerpo fue hallado cerca de las 9, tendido en el piso y junto a sus pertenencias. Varios de los moradores de la zona que dialogaron con La Capital indicaron que Miguel Angel Torrent era un compañero amable y siempre solidario. Nadie supo por qué abandonó el techo de la estación de colectivos para pernoctar a la intemperie.

Con las primeras luces de la madrugada, algunos grupos que rondan el lugar pudieron ver a Torrent con vida acurrucado junto a unos arbustos y con algunos pertrechos a un costado. El fallecido era oriundo de San Nicolás y hacía varios años que se había establecido en Rosario.

«Venía de limpiar unas veredas de unos clientes acá por el barrio y lo vi con vida. Eran como las 7.30», le comentó a este diario un muchacho que estaba en una de las mesas y banquetas de cemento de la plaza contigua a la terminal.

Sin embargo, cerca de las 9, los efectivos policiales que acudieron a la plaza constataron el fallecimiento de Torrent. Estaba en la misma posición en la que lo habían visto horas antes y en la plaza de Santa Fe, entre Alsina y Castellanos. Según los primeros elementos, su deceso se produjo por causas naturales.

En rigor, la fiscal Mariana Prunotto, de la Unidad de Homicidios Culposos, solicitó que se envíe el cuerpo a autopsia para determinar su muerte. Todo hace suponer que incidió la baja temperatura de la madrugada de ayer. Un flagelo que también se extiende a otros puntos del país.

«Lo vi ayer a la mañana y después nos sorprendimos porque la policía sacaba fotos a un cuerpo», dijo uno de los muchachos que deambula y están en situación de calle en la zona de la Terminal de Omnibus.

Según contó otro hombre que se identificó como amigo, Torrent tenía algunos inconvenientes psiquiátricos pero era amable, pacífico y se relacionaba con el resto del grupo. El dato fue corroborado por una vocera de la Secretaría de Desarrollo Social del municipio.

«Algunas veces aprovechaba y con el certificado gratuito de traslado en servicios de larga distancia iba a Misiones o Buenos Aires», recordó otra persona.

«Acá se juntaba con nosotros. Lo veíamos todos los días, o tomábamos mate. Acá somos todos de la calle», señaló una joven. También contaron que personal de la GUM le había ofrecido en algún momento buscar protección contra el frío en un refugio, pero que había rechazado esa opción.

«En términos generales, no accedía a ser trasladado. En algún momento pasó por el refugio Sol de Noche, pero no se quedó», confirmó una fuente oficial. Entre las explicaciones, indicaron que resultó raro que haya ido a dormir a cielo abierto. «Capaz peleó con alguno dentro de la terminal y se fue, porque es muy raro que lo hayan encontrado afuera. El solía dormir adentro», remarcaron.

Todos los consultados mostraron preocupación por el aumento de familias y personas que pernoctan en la estación de ómnibus y ahora están en situación de vulnerabilidad. Y remarcaron que es «imposible» pagar una noche en cualquier alojamiento debido a la crisis económica.

Desde Rosario Solidaria su responsable, Jorgelina De la Torre, indicó que las entidades junto al municipio están trabajando en forma coordinada concentrando esfuerzos, tanto en los refugios como en el Club Nueva Aurora, donde se habilitó otro tercer eslabón para albergar a las personas en situación de calle. «Estamos también con voluntarios recorriendo a la noche, llevando mantas y abrigo e invitándolos a dormir en un lugar bajo techo donde tendrán abrigo, alimento y un lugar para higienizarse». Y destacó que la solidaridad rosarina, «enorgullece».

«Era muy bueno con todos, amable. Nos veíamos todos los días y tomábamos mate», dijeron sus conocidos.