Y continuó: «Cuando aflojas comenzás a sentir el dolor en la pierna, ni cuenta te diste antes que el posa brazos de tu asiento te detuvo en el movimiento. Te aterra lo que viviste. Agarras el celular, solo querés avisar a tu familia que estás bien. Y cuando miras por la ventanilla y ves un camión involucrado, sentís que estuviste muy cerca de no poder contarla«.
Reveló que «el camión pudo frenar un poco y que el chofer no lo vio al tomar la ruta porque otro colectivo mal estacionado le tapaba la visión«, pero aclaró que «eso son solos detalles del siniestro en una crónica periodística».
«Lo que sí puedo decir es que el corazón de los pasajeros seguro nos aturdía si hubiéramos podido replicarlo al mismo tiempo. Puedo expresar que sentí tristeza por ese chofer que jamás antes vi, quizás era su primer día en este empleo nuevo o quizás nunca realizó este recorrido, también comprendí la bronca de algunos pasajeros que lo cuestionaban y él respondía «están bien? No lo vi hermano, solo quiero saber que estén bien»».