Un nuevo capítulo en la causa Maradona se sumó este jueves. Leopoldo Luque, principal imputado de la causa, pidió que la Justicia investigue a otros dos médicos por el fallecimiento del ídolo argentino. Se trata del médico clínico Pedro Di Spagna y el médico neurólogo Macías.

Como un manotazo de ahogado, Luque hizo esta solicitud ya que según él eran quienes «controlaban y medicaban al paciente dando las instrucciones médicas a los enfermeros».

Luque recordó que dichos médicos fueron a ver a Maradona a su casa del Tigre el 12 y 18 de noviembre, pocos días antes de su muerte. El pedido de Luque intentando deslindar responsabilidad sobre otros medios, se basa en que luego la fiscalía de San Isidro impute a Nancy Forlini y a Mariano Perroni.

¿Quienes son? Forlini oficiaba de nexo entre los médicos clínicos de la obra social y los acompañantes terapéuticos, y Perroni, quien coordinaba a los enfermeros que asistían a Maradona y dependían de la empresa tercerizada Medidom.

Forlini y Perroni formaban parte del chat de WhatsApp denominado «Tigre», donde los enfermeros reportaban todas las novedades sobre Maradona y donde quedaron evidenciadas algunas graves falencias de la internación.

Con Forlini y Perroni, ya son siete los imputados que hay en esta causa que tiene como principales sospechosos al neurocirujano Leopoldo Luque (39) y a la psiquiatra Agustina Cosachov (35).