Se recupera favorablemente Milo, el bebé de nueve meses que recibió un trasplante de parte del hígado de su tío, Alejandro «Lulo» Benítez, un jugador de fútbol de Central Larroque.
Se recupera favorablemente Milo, el bebé de nueve meses que recibió un trasplante de parte del hígado de su tío, Alejandro «Lulo» Benítez, un jugador de fútbol de Central Larroque.
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«Su tío le salvó la vida», aseguró, Wilfredo Romani, papá de Milo. El pequeño que padecía una severa complicación biliar, está en pleno proceso de recuperación tras el trasplante y por estas horas registraba un cuadro febril del que se desconocía su procedencia.
«Todo lo relacionado al trasplante viene bien, los médicos no han visto señales de rechazo al trasplante, los estudios fueron positivos, y le realizan un hemocultivo para saber de dónde viene la fiebre», confirmó el hombre.
Todavía resta esperar hasta cuatro semanas para establecer la adaptación del trasplante en el organismo del pequeño.
Según contó «Wili», el pequeño recibió ayer la visita de sus dos hermanitos. «Cuando él los vio, se reía, si hasta le cambió el color de la cara porque estaba amarillo. Los hermanitos estaban chochos, porque no lo veían desde antes de la operación», rememoró.
Milo permanece despierto y sedado. «Ya al día siguiente de la cirugía, estaba despierto. Ahora está sedado y le bajaron las dosis de morfina. Está con mucha medicación para que no haya rechazo al trasplante, así que está molesto por eso, inquieto porque lo tocan cada media hora para dale hasta 20 remedios en el día», comentó Wili.
«Tiene hasta un año de recuperación, y habrá que pelearla», aseguró el papá de Milo.