Para lograr este proceso fácil y rápidamente en su casa, siga estos pasos:

Triture y corte los vegetales elegidos. El repollo debe representar al menos 80 % de su mezcla de verduras.

En un extractor de jugo, obtenga abundante jugo de apio para cubrir los vegetales. Se usa apio ya que contiene sodio natural.

Ponga granos de kéfir dentro de un filtro para café cerrado o una funda de tela doblada para que no se escape, en el fondo de un frasco de vidrio de boca ancha. Agregue los vegetales y el jugo de apio. Aplaste bien para que los vegetales queden apretados y sin espacio para salirse.

Cúbralos con una hoja de repollo. Asegúrese de llenar el recipiente con jugo de apio.
Selle el frasco y colóquelo en un lugar cálido y ligeramente húmedo durante 24 a 96 horas. En rango de temperatura ideal es de 20 a 24 grados, máximo 30º.

Cuando haya logrado el grado de lacto-fermentación deseada en sabor y consistencia, guárdelo en la heladera para frenar el proceso de fermentación. Se conserva hasta 6 meses en la heladera.

El consumo regular de alimentos fermentados es la forma más eficaz de curar un intestino permeable, colon irritable, colitis, alergias crónicas y trastornos del sistema inmunológico.