Fernanda tiene 21 años, es oriunda de Villaguay y cursaba el segundo año del profesorado de Psicología.

El sábado 21de octubre, fue invitada para ir pasar el día a Colón con un amigos, pero al regreso, tuvieron un tremendo accidente a la altura del kilómetro 53 de la Ruta 130.

La joven iba como acompañante de un automóvil Volkswagen Bora, cuyo conductor se durmió al volante, el rodado se fue a la banquina y al encontrarse con una alcantarilla, la que le hizo de rampa para volar hasta 39 metros por el aire, cuando cayó de punta, dio varios tumbos hasta quedar completamente destrozado.

Fernanda fue la más afectada como consecuencia del siniestro. Desde hace dos meses que permanece internada en la habitación 311 de Neurología, en el tercer piso del hospital San Martín de Paraná.

«Pensamos que no tendría que haber salido viva, por cómo quedó el auto», reconoció su madre, Norma Zahuán.

«Se quebró la columna, se le soltó la médula, le colapsó un pulmón y estuvo muy grave. Se quebró la clavícula, las costillas, tiene clavos en la muñeca y no va a caminar más, solo maneja desde la cintura para arriba», lamentó la mujer.