De la niñez a la adolescencia: qué esperar

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La pubertad es el período de desarrollo que sucede a la niñez y en el que se producen los cambios físicos que preparan a los niños y niñas para adquirir la capacidad reproductiva. Acompañando los cambios físicos del desarrollo en ambos sexos se producen modificaciones en el comportamiento en pos de la búsqueda de la autonomía y de la identidad sexual. Los cambios psicosociales se prolongan más allá de la finalización del proceso de los cambios corporales, en la transición hacia la adultez. Así lo detallan expertos del Comité Nacional de Endocrinología de la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP), quienes elaboraron una guía para la comunidad en la que responden a las dudas vinculadas con esta etapa del crecimiento.­

– ¿Cuándo se produce y cuál es el signo inicial en las niñas?­

– En las niñas puede iniciarse a partir de los 8 años y hasta los 13. El primer signo es la aparición del botón mamario que puede comenzar en un solo lado y un tiempo después iniciarse el desarrollo de la otra mama. Habitualmente, las niñas refieren aumento de sensibilidad o ligero dolor en la zona.­

– ¿Qué otros eventos suceden en la pubertad femenina?­

– En general, unos meses después del inicio del desarrollo mamario aparece el vello pubiano y más tarde el vello axilar. Pueden aparecer comedones, seborrea del cuero cabelludo y acné.­

El desarrollo puberal se completa con la primera menstruación (llamada menarca), que suele presentarse entre dos y tres años después de la aparición del botón mamario. En nuestra población, la mayoría de las niñas tienen su primera menstruación aproximadamente a los 12.5 años.­

– ¿Cómo son los primeros ciclos menstruales?­

– Durante los primeros dos a tres años después de la menarca, los ciclos menstruales pueden ser irregulares, con intervalos variables entre los sangrados menstruales. Se debe consultar si los sangrados fueran muy abundantes, prolongados (más de siete días de duración) o si los intervalos fueran cortos (menos de 21 días) o muy prolongados (más de tres meses).­

– ¿Cómo crecen las niñas durante la pubertad?­

– La estatura aumenta mucho en el primer y segundo año posteriores al inicio del desarrollo mamario (estirón puberal). Luego de la primera menstruación, las niñas continúan creciendo pero a un ritmo menor que el del estirón, alcanzando su estatura definitiva habitualmente dos a tres años después de la menarca.­

LOS VARONES­

– ¿Cuándo se produce y cuál es el signo inicial en los varones?­

– En los varones, el desarrollo puberal puede iniciarse entre los 9 y los 14 años de edad. El primer signo de desarrollo es el aumento del volumen testicular con leve agrandamiento y rugosidad de la bolsa escrotal.­

– ¿Qué otros eventos suceden en la pubertad masculina?­

– Aparición del vello pubiano, que se inicia en el escroto y base del pene y va progresando hasta el estadío adulto en que adopta una distribución triangular y finalmente romboidal. Conjuntamente, se produce el crecimiento del pene.­

Al igual que en las niñas, pueden aparecer comedones, seborrea del cuero cabelludo y acné. Más avanzada la pubertad se producen cambios en la voz,­ aparición del vello axilar, del vello facial en los extremos del labio superior y en la parte alta de las mejillas y luego su extensión al resto de la cara y mentón en el último estadío del desarrollo.­

Aproximadamente, la mitad de los varones en las etapas intermedias del desarrollo pueden presentar aumento de tamaño en una o ambas mamas con molestias o dolor local, generalmente transitorio y que desaparece al completarse el desarrollo en la mayoría de los casos.­

– ¿Cómo crecen los niños durante la pubertad?­

– El estirón del desarrollo puberal es más tardío en los varones y se produce con mayor intensidad que en las niñas.­

La duración del desarrollo puberal en los varones es más prolongada que en las mujeres, de aproximadamente 4 a 5 años, al final de los cuales alcanzan su estatura definitiva.­

AMBOS SEXOS­

«El crecimiento de manos y pies precede al aumento de crecimiento en longitud de los miembros y el tronco. La masa muscular continúa desarrollándose aún después del estirón, por lo que no se aconseja la práctica de ejercicios con aparatos o pesas hasta completado el crecimiento. Durante la pubertad es necesario recibir alimentos ricos en calcio para fortalecer la masa ósea», concluyen desde la SAP.­

LOS RIESGOS­

Más allá de los cambios psicofísicos que se producen durante el paso de la infancia a la adolescencia, este periodo de la vida también presenta características que exigen especial atención a la hora de prevenir ciertos riesgos.­

«Se calcula que en 2015 murieron 1,2 millones de adolescentes, es decir, más de 3.000 al día, en su mayoría por causas prevenibles o tratables», alerta la Organización Mundial de la Salud.­

Según destaca la entidad sanitaria, la mayoría de los jóvenes goza de buena salud, pero la mortalidad prematura, la morbilidad y las lesiones entre los adolescentes siguen siendo considerables.­

«El consumo de alcohol o tabaco, la falta de actividad física, las relaciones sexuales sin protección o la exposición a la violencia pueden poner en peligro no solo su salud actual, sino también la de su adultez e incluso la salud de sus futuros hijos», remarca la OMS.­

En ese sentido, insta a fomentar comportamientos saludables durante la adolescencia y adoptar medidas para proteger mejor a los jóvenes contra los riesgos sanitarios para la prevención de problemas de salud en la edad adulta, así como para la salud futura de los países y su capacidad para desarrollarse y prosperar.­

Entre los principales problemas para la salud menciona:­

* Embarazos y partos precoces: las complicaciones relacionadas con el embarazo y el parto son la principal causa de mortalidad entre las adolescentes de 15 a 19 años en todo el mundo.­

Aproximadamente el 11% de todos los nacimientos a nivel mundial corresponden a mujeres de 15 a 19 años y la mayor parte de esos nacimientos se registra en países de ingresos bajos y medianos.­

La División de Población de Naciones Unidas muestra que la tasa mundial de natalidad (2015) de las adolescentes de esa edad asciende a 44 nacimientos por 1.000 y, en función de los países, oscila entre 1 y más de 200 por 10.001. Esas cifras indican un marcado descenso desde 1990, que se refleja asimismo en la disminución de las tasas de mortalidad materna de las mujeres de 15 a 19 años.­

* VIH: más de dos millones de adolescentes viven con VIH. Aunque el número total de muertes relacionadas con el VIH ha disminuido un 30% con respecto al nivel máximo registrado en 2006, las estimaciones disponibles indican que las defunciones por VIH entre los adolescentes están creciendo.­

Se precisa un mayor acceso a pruebas de detección del VIH y asesoramiento sobre el tema, así como el establecimiento subsiguiente de vínculos más estrechos entre las personas que dan positivo en las pruebas de detección del VIH y los servicios de tratamiento del virus.­

* Otras enfermedades infecciosas: gracias a las mejoras registradas en la vacunación infantil, la mortalidad y morbilidad por sarampión entre los adolescentes han descendido de manera notable. La diarrea y las infecciones de las vías respiratorias inferiores figuran entre las cinco primeras causas de muerte en el grupo de 10 a 19 años. ­

* Salud mental: la depresión es la tercera causa principal de morbilidad y discapacidad entre los adolescentes y el suicidio es la tercera causa de defunción entre adolescentes mayores de entre 15 y 19 años. La violencia, la pobreza, la humillación y el sentimiento de desvalorización pueden aumentar el riesgo de padecer problemas de salud mental.­

Propiciar el desarrollo de aptitudes para la vida en los niños y adolescentes y ofrecerles apoyo psicosocial en la escuela y otros entornos de la comunidad son medidas que pueden ayudar a promover su salud mental. También desempeñan una función importante los programas que brindan apoyo para fortalecer los lazos entre los adolescentes y sus familiares. Si surgen problemas, deben ser detectados y manejados por trabajadores sanitarios competentes y con empatía.­

* Violencia: es una causa importante de mortalidad entre adolescentes mayores de sexo masculino. La violencia interpersonal representa un 43% de todas las defunciones de varones adolescentes registradas en países de ingresos bajos y medianos de la Región de las Américas de la OMS. A nivel mundial, 1 de cada 10 chicas menores de 20 años indica haber sufrido violencia sexual.­

Fomentar relaciones de atención y cariño entre padres e hijos en una etapa temprana de la vida, propiciar el desarrollo de aptitudes para la vida y reducir el acceso al alcohol y las armas de fuego puede contribuir a prevenir lesiones y defunciones como consecuencia de la violencia. Asimismo, ofrecer a los jóvenes supervivientes de actos de violencia una atención eficaz y empática puede ayudarlos a superar las secuelas físicas y psicológicas.­

* Alcohol, drogas y tabaco: el consumo nocivo de alcohol entre los adolescentes preocupa cada vez más a muchos países, ya que reduce el autocontrol y aumenta los comportamientos de riesgo, como las relaciones sexuales no protegidas o comportamientos peligrosos al conducir. Es una de las principales causas de lesiones (incluidas las provocadas por accidentes de tránsito), violencia (especialmente por parte de la pareja) y muertes prematuras. Además, puede provocar problemas de salud en una etapa posterior de la vida e influir en la esperanza de vida.­

El consumo de drogas entre los jóvenes de 15 a 19 años también es una fuente de preocupación importante a nivel mundial. ­

Al menos uno de cada diez adolescentes (de 13 a 15 años) consume tabaco en el mundo, y en algunas regiones esa cifra es mucho mayor. Prohibir la venta de productos de tabaco a menores, subir el precio de esos productos gravándolos con impuestos más altos, prohibir la publicidad del tabaco y garantizar la existencia de entornos libres de humo es sumamente importante. ­

* Traumatismos: las lesiones involuntarias son la principal causa de mortalidad y discapacidad entre los adolescentes. En 2015, más de 115 000 adolescentes fallecieron como resultado de accidentes de tránsito. Los jóvenes conductores necesitan asesoramiento sobre seguridad vial, y al mismo tiempo hay que aplicar con rigor las leyes que prohíben conducir bajo los efectos del alcohol y las drogas. Es preciso asimismo fijar unas tasas de alcoholemia más bajas para los conductores adolescentes y se recomienda establecer permisos progresivos para conductores noveles con tolerancia cero para el alcohol al volante.­

Los ahogamientos son también una de las principales causas de mortalidad entre los adolescentes.­

* Malnutrición y obesidad: muchos niños y niñas de países en desarrollo padecen desnutrición cuando llegan a la adolescencia, lo que los hace más propensos a contraer enfermedades y morir a una edad temprana. En el lado opuesto, el número de adolescentes con exceso de peso u obesidad está aumentando en los países de ingresos bajos y altos.­