El detenido ex ministro de Planificación Federal durante el kichnerismo, Julio De Vido, rechazó hoy las acusaciones en su contra por el financiamiento estatal a una novela de la actriz Andrea del Boca, al ser indagado por videoconferencia desde la cárcel de Marcos Paz.

El trámite estuvo a cargo del juez del caso, Sebastián Ramos, ante quien la defensa del ex funcionario entregó un escrito en el cual rechazó los cargos, informaron fuentes judiciales.

De Vido sostuvo en ese escrito que la adjudicación del para la novela «Mamá Corazón» no fue una decisión «personal» suya y defendió los convenios de tercerización con la universidad implicada, la de San Martín, según fuentes judiciales.

En su defensa, sostuvo que la decisión de financiar la telenovela fue «lícita» y que si el Estado «no lo hacía a través de la Universidad nacional, debiera haberlo hecho con una entidad privada o sumando más recursos propios del Ministerio, opciones que también hubieran significado erogación de gastos».

En tanto, en un comunicado de prensa que difundió después de la declaración el estudio de Maximiliano Rusconi, abogado a cargo de la defensa del ex ministro de Planificación, se remarcó que «el Consejo Asesor del proyecto de SATVD-T (televisión digital) firmó convenios para la realización de contenidos audiovisuales con la Unsam y el Incaa».

«Dichos convenios no sólo fueron útiles, sino que fueron completamente lícitos y se encuentran habilitados» por normativas «resueltas por autoridades nacionales que no fueron el señor De Vido», indicó la defensa en el comunicado.

En este sentido, mencionó los decretos 1148/2009, 364/2010, el decreto 1023/2001 -de contrataciones públicas- y su modificatoria decreto 204/2004, la Ley de Educación Superior -artículo 59, inciso C-, la Ley de Servicios de Comunicación audiovisual».

El ex ministro de Planificación del kirchnerismo sostuvo en su declaración que se buscó poner en funcionamiento el «Plan de Fomento Audiovisual».

La telenovela tuvo un presupuesto de 36 millones de pesos, de los cuales la productora de De Boca, A+A Group, cobró por adelantado un 76,01 por ciento pero la tira no se terminó y nunca fue emitida, según la acusación del juez. Ese dinero provino de Planificación Federal y fue tercerizado por la Universidad de San Martín, según el expediente.

En la causa se investiga por qué la cartera que condujo De Vido destinó fondos públicos a financiar producciones televisivas, algo que no estaba dentro de sus funciones, por lo que se estaría ante una malversación de fondos.

Con la declaración de hoy de De Vido quedó cerrada la ronda de indagatorias, que incluyó a Del Boca, con lo cual, ahora, el juez quedó en condiciones de resolver la situación procesal de todos los imputados.

«El Sr. Julio Miguel De Vido no formó parte de la gestión y puesta en marcha de los proyectos en concreto. Aun así, se pone en conocimiento de la comunidad que las pericias realizadas respecto de las producciones audiovisuales ‘Mamá Corazón’ y ‘El Pacto’ determinaron la inexistencia de defraudación o perjuicio alguno, estando las productoras y sus producciones ajustadas a derecho», subrayó el estudio.

En el comunicado de la representación legal de De Vido se subrayó que «la construcción mediática de una maniobra para defraudar al estado mediante la generación de contenidos audiovisuales de alta calidad es falsa» y que «los proyectos se realizaron a través de entidades de renombre como la Unsam y el Incaa, resultando productos culturales premiados e incorporados en el acervo documental nacional mediante el portal BACUA (Banco Audiovisual de Contenidos Audiovisuales Argentino)».