Brasilia (ANSA y EFE) – La presidenta del Partido de los Trabajadores (PT), Gleisi Hoffmann, ratificó que el ex mandatario Luiz Inácio Lula da Silva, preso en Curitiba, será el candidato de la agrupación izquierdista en los comicios de octubre próximo, y rechazó de plano la presunta renuncia a su postulación.

«El PT vuelve a decir que no hay otro candidato que no sea el presidente Lula, esta posición fue ratificada ayer (por el lunes) nuevamente cuando leímos la carta enviada por él, en sus dichos no hay nada que deje traslucir su intención de no ser candidato», aseguró Hoffmann.

«No tenga dudas, no hay plan B en el PT para las elecciones, Lula es cien por ciento nuestro candidato», subrayó la senadora en diálogo con la prensa internacional.

Además de comandar el PT, Hoffmann es la vocera de Lula, quien desde el 7 de abril está arrestado en una celda del cuarto piso de la Superintendencia de la Policía Federal en la sureña ciudad de Curitiba, donde cumple una condena de 12 años y un mes por corrupción y lavado de dinero.

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GESTO DE APOYO­

Como gesto de respaldo a Lula, el PT trasladó su sede principal a esa ciudad, donde ya sesionó la Mesa Ejecutiva y el lunes se reunió el directorio nacional.

En una misiva dirigida al directorio del PT, Lula escribió: «Quiero que actúen con total libertad para decidir quién será candidato».

Esa afirmación, observó Hoffmann, «no fue otra cosa que un gesto de consideración de Lula por el PT, porque él siempre es respetuoso de las instancias partidarias, nunca impone su opinión en nada, siempre se condujo de esa manera. Lo que escribió no fue una manifestación de su interés en salir de la campaña, además él siempre dijo que quería estar en las elecciones».

Mientras tanto, Lula volvió a presentar nuevos recursos para que su condena por corrupción sea analizada por las instancias superiores con la expectativa de aguardar las apelaciones en libertad.

Al mismo tiempo, la jueza responsable de la ejecución de la pena del ex gobernante aceptó analizar la solicitud hecha por la Policía Federal para trasladar a otra cárcel al preso más famoso del país.

En la actualidad Lula cumple su condena en una celda de 15 metros cuadrados adaptada especialmente para él en la sede de la Policía Federal en Curitiba. Esa fuerza pide el traslado a una prisión más adecuada debido a los inconvenientes que provocó su reclusión en esa instalación.

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