Fueron los vecinos los que llamaron a los bomberos al ver que la vivienda se estaba prendiendo fuego. Las rejas de las ventanas impidieron el ingreso de los moradores del barrio que quisieron ayudar al sospechar que había gente adentro. Un familiar de las víctimas intentó romper la pared con una maza, pero no pudo.
Cuando llegaron los bomberos, alrededor de las 5.30 de la mañana, las personas fallecidas yacían en los dormitorios de la casa. «Cuando llegó la dotación se encontró el segundo piso totalmente tomado por las llamas. Al acceder a los dormitorios, se encuentran con este duro panorama y cuatro víctimas», explicó el jefe bomberos.
Una de las hipótesis es que los techos de la casa estaban recubiertos con poliestireno expandido (telgopor), lo que habría facilitado la propagación de las llamas. La tragedia enlutó a una humilde barriada, que no lograba salir de la consternación.
«Sentimos los gritos. Los chicos nos pedían que los saquemos. Fue terrible. Los bomberos llegaron tarde, yo llamé tres veces. Estamos muy golpeados», contó con un nudo en la garganta la vecina que vive en la propiedad lindera.
Las víctimas fueron identificadas como de Liliana Santana (8), Xiomara Santana (9), Elías Santana (17) y la madre de los menores Rosa Ríos (42), quien cursaba su séptimo mes de embarazo.
Una cuarta hija de la mujer y su beba de dos años sobrevivieron al incendio. Ellas dormían en la planta baja de la vivienda y pudieron escapar del fuego.
