La presencia de microbios en la boca, la saliva y los dientes puede estar asociada a factores de la salud y de la higiene dental. Cuando los microorganismos consiguen sobrevivir y persistir mucho tiempo sobre la superficie dental, pueden organizarse y causar caries, gingivitis (enfermedades de las encías) o enfermedad periodontales. ¿Lo mejor? Se puede prevenir con estos simples alimentos que tenemos en casa…

– Limón: Gracias a su poder antiinflamatorio y antiséptico, el limón puede contribuir a reducir la inflamación de las encías. Lo ideal es mezclarlo con agua tibia y usarlo para enjuagar la boca.

– Manzana: Esta fruta es muy útil para una posterior higiene bucal. Masticá un cuarto de manzana, especialmente después de comer.

– Sal: La sal tiene propiedades antibacterianas que evitarán la proliferación de microorganismos que puedan empeorar la situación. Enjuagá tu boca con una mezcla de media cucharadita de sal en 120 mililitros de agua tibia. Déjala reposar en tu boca durante un rato y hacé buches hasta expulsarla. Repetí este ejercicio varias veces al día.