Inés Cecilia Martínez quedó a cargo de la Dirección General de Narcocriminalidad de la Policía Federal. Es una de las grandes apuestas que hizo Roncaglia desde que fue nombrado como jefe de PFA en marzo de 2016.

En ese sentido, según la Orden del Día Interna (ODI) de la fuerza número 231 Martínez reemplazó a Luis Abel Gigena, quien fue ascendido a superintendente de Drogas Peligrosas.

La última vez que una mujer había encabezado esta dirección general fue entre 2011 y 2012 cuando lo hizo la por entonces comisario inspector Marta Confalone de Gregorian, quien junto a Mabel Franco -hoy subjefa de la fuerza como comisario general- fueron las dos primeras mujeres en llegar a esa jerarquía.

A Confalone de Gregorian la sustituyó en ese entonces el propio Roncaglia, quien era director general de Narcocriminalidad y también estaba a cargo de la Superintendencia de Drogas Peligrosas, luego de haber ascendido a comisario inspector por orden de la entonces ministra de Seguridad de la Nación Nilda Garré, tras el exitoso operativo narco Luis XV, en el que se secuestraron 280 kilos de cocaína.

En esta ocasión, Martínez es considerada pieza clave para Roncaglia, ya que desde que asumió como jefe de la fuerza le dio puestos vitales y más que operativos.

En ese sentido, a fines de 2016 la nombró como directora General de Lucha contra el Crimen Organizado y un año después la ratificó en ese cargo.

En esta ocasión le dio una función directamente vinculada con la lucha contra el narcotráfico, en la que tendrá un rol más operativo y primera en la línea sucesoria de Gigena.

Por otra parte, el comisario inspector Marcelo De Pierro quedó a cargo de la Dirección General de Coordinación Internacional en reemplazo del comisario mayor Mario Daniel Ferreiro, quien pasó a ser superintendente de Bienestar.

El comisario mayor Cayetano Vicente Burzi pasó de la Dirección General de Inteligencia Criminal a la Dirección General de Aviación Federal en sustitución del comisario mayor Osvaldo Di Prisco, quien pasó a ser superintendente Federal de Transporte.

El comisario mayor Ricardo Antonena fue designado como director General de Coordinación de Inspectoría General, mientras que el comisario mayor Eduardo Omar Señoran fue nombrado en la Dirección General de Planeamiento Estratégico y Relaciones Institucionales (así pasó a llamarse la degradada Superintendencia de Planeamiento Policial que encabezaba Antonena).

En tanto, el comisario mayor Daniel Palasi quedó a cargo de la Dirección General de Inteligencia Criminal que antes tenía como jefe a Burzi.