La salvia alivia contracturas y mejora el sueño

Comentarios desactivados en La salvia alivia contracturas y mejora el sueño 1

La salvia es un arbusto que crece de forma natural en muchos países del mundo y hay variedades ornamentales, con hermosas flores, y otras para la cocina. También, existen diversas especies aplicadas en medicina.

La más común es la salvia officinalis. Se caracteriza por su cualidad para aromatizar ensaladas, carnes, pescados, y todo tipo de platos de verduras, ya que realza su sabor. También se utiliza para dar aroma y sabor al vinagre y el aceite. Pero encierra virtudes sorprendentes en sus hojas que van más allá de lo gourmet.

Antiinflamatoria

La salvia, para empezar, sirve para reducir la respuesta inflamatoria del organismo. Personas con trastornos como artritis reumatoide, asma bronquial y aterosclerosis pueden aliviarse con su consumo, pero además se benefician aquellos sometidos a períodos de estrés, debido a que este hace subir los niveles de las hormonas inflamatorias, generando estados de malestar general.

Mejora la memoria

También, es excelente para mejorar la memoria y el procesamiento de información, tanto en personas sanas como en aquellas que sufren de la enfermedad de Alzheimer. La salvia ayuda a la conservación de la acetilcolina, uno de los principales neurotransmisores, por lo que las infusiones de esta planta podrían ayudar a aquellos afectados por el Mal del Azheimer en sus estadios iniciales.

Para dormir mejor

La salvia tiene numerosos beneficios antiestrés, porque es un poderoso relajante muscular, de uso externo e interno. Para tener un sueño tranquilo y evitar el insomnio es recomendable beber un té de salvia antes de acostarse a dormir; para ello se deben agregar a 1 taza de agua hirviendo ½ cucharadita de flores de manzanilla y ½ de salvia. Dejar infundir por 7 minutos y beber tibio. Esta misma infusión puede aliviar los llamados calambres por estados de nerviosismo en la boca del estómago.

Alivia contracturas

En su uso externo, la salvia alivia la tensión y el dolor en los músculos en caso de estiramientos o esfuerzos demasiado grandes. Se frota la zona dolorida con una mezcla de 10 gotas de aceite esencial en dos cucharadas de aceite vehicular, como el de almendras o de oliva. También se puede añadir 20 gotas al agua de un baño de inmersión relativamente caliente y sumergirse unos 15 minutos. En el caso de utilizar una infusión, esta debe ser preparada con 3 cucharadas de planta seca por litro de agua.