Un grupo de investigadores de la Universidad de Córdoba (UCO), en España, han logrado extraer pasta de celulosa a partir de restos de berenjena, pimiento y tomate que se puede incorporar en el proceso de fabricación de envases y cartones.

La UCO ha explicado en una nota que, anualmente, los invernaderos retiran una cantidad elevada de residuos hortofrutícolas de tipo leñoso una vez finaliza la temporada de cosecha, lo que motivó al grupo investigador conformado por Alejandro Rodríguez, Rafael Sánchez y Eduardo Espinosa, desarrollar el proyecto.

El investigador Rodríguez ha expuesto la aplicación que se ofrece a los agricultores es “hacer pasta de celulosa a partir de esos desechos” que pudiera ser incorporada en la fabricación de “cartones para cajas y bandejas”, donde ellos “embalasen la mercancía y enviasen sus productos”.

A nivel de laboratorio han llevado a cabo ensayos para ver si lo que se obtenía era susceptible de ser utilizado en la fabricación de cartones.

“Lo que este proyecto nos facilitó, al ser de transferencia, es que tenía un componente de prueba de concepto, por lo que permitió la contratación de una empresa que se dedica a hacer envases por termo formado a escala piloto para ver qué podíamos obtener de esa pasta de celulosa y si era viable”, ha añadido el investigador.

Resultado satisfactorio tras las pruebas

Tras varias pruebas, el resultado ha sido satisfactorio, obteniendo un rendimiento del proceso en torno al 60 por ciento.

Posteriormente, se han logrado crear bandejas con un 20 %, 40 % y 60 % de pasta mecánica de hortícolas compensada respectivamente con un 80 %, 60 % y 40 % de pasta mecánica de pino.

Un ejemplo sería el molde de la bandeja modelo “Quetzal”, cuadrada de 180 milímetros de ancho y 36 mm de alto, con un volumen de 665 mililitros capacidad.

Dichas bandejas, al ser de origen vegetal ya que están basadas en celulosa, se presenta como una solución integral en el sector del empaquetamiento sostenible para alimentos.

Además, las bandejas desarrolladas se caracterizan por ser horneables, microondables, congelables y 100 % compostables, mientras que gracias a este proyecto, el grupo de investigación ha solicitado la patente para la elaboración de este tipo de producto.