La mayoría de los accidentes eléctricos se pueden prevenir, tanto en el hogar como en el puesto de trabajo. Siguiendo algunos consejos será más fácil tener un hogar libre de riesgos.

• No tener cables desprotegidos y a la vista o al alcance de los niños.
• Evitar el uso de aparatos eléctricos mientras se está mojado, en la bañera, ducha, piscina… No estar en la bañera con el celular cargándose. Secarse bien las manos antes de manipular estos aparatos y ponerse calzado aislante ( con suela de goma)
• Seguir las instrucciones de seguridad de los electrodomésticos y herramientas eléctricas del hogar, leer bien antes de usar.
• Proteger las tomas de corriente con tapas de plástico.
• Enseñar a los más pequeños los peligros de la electricidad. Los niños no deben tocar objetos eléctricos si están descalzos o mojados.
• Asegurarse de que los cables con corriente no puedan tocarse por accidente, ponerles cinta aislante y guardarlos o protegerlos.
• A la hora de arreglar un aparato eléctrico asegurarse de desconectarlo antes. Protegerse si se van a manipular enchufes o cableado eléctrico con guantes de goma, zapatos con suelas de goma y utilizar herramientas homologadas con puño de plástico.
• Al desconectar un enchufe no tirar del cable, sino del cabezal de plástico.
• Evitar la sobrecarga en los enchufes. A menudo tomamos corriente de un mismo lugar utilizando “zapatillas”. Estas resisten una determinada cantidad de voltaje, no se deben enchufar en ellas varios aparatos de alto consumo ( plancha, pava eléctrica, microondas, cafetera, por ejemplo). Las tomas se recalientan y puede iniciarse un incendio.
• Respetar las señalizaciones que anuncian peligro por fuentes de electricidad.
• Después de una fuerte tormenta no acercarse a postes de luz rotos y cables caídos.