Este lunes quedó inaugurada la primera fábrica de colchones confeccionados en la Unidad Penal Nº1 de Paraná. Se trata de una iniciativa inédita en el país que tiene por objetivo brindar herramientas necesarias para la reinserción social de los internos. “Es la primera vez que se pone en práctica un proyecto de estas características en el sistema carcelario, como estrategia para que las personas privadas de su libertad puedan tener acceso a un oficio”, destacó el ministro de Gobierno, Adán Humberto Bahl.

Destacan la iniciativa

Luego de la ceremonia inaugural, el titular de esa cartera política remarcó la importancia de dicho emprendimiento. “Es un paso más que hemos dado desde la gestión de Sergio Urribarri en cuanto a políticas de reinserción. Un resultado altamente positivo, que fue concretado a través de la interacción y articulación de estrategias entre lo público y lo privado, pero también, gracias a la colaboración de personas que tuvieron la necesidad y voluntad de emprender nuevas ideas”.

En ese contexto dio detalles de cómo surgió dicha iniciativa, “fue a través de un convenio celebrado entre una ONG, la Unidad Penal y los Ministerios de Desarrollo Social de nación y provincia. Pretendemos lograr múltiples efectos, no solo apuntar a la resociabilización, sino además a la comercialización y producción de colchones de muy buena calidad y a un bajo costo”, dijo y agregó: “Es una acción que está orientad al sector público, que proveerá no solo al Servicio Penitenciario, a otros entes del Estado, como así también asistirá a situaciones de emergencias que se sucedan en la provincia”.

“Para nosotros el haber concretado este proyecto redunda en muchos beneficios, pero el mayor de esos logros es que los internos puedan aprender un oficio con un beneficio económico. Y con la posibilidad de que en el día de mañana cuando recuperen su libertad puedan conseguir un trabajo relacionado a ello”, argumentó Bahl.

Asimismo recordó que en las Unidades Penales, también se llevan a cabo otros talleres, “relacionados a la producción de mobiliario destinados a las escuelas de la provincia, que cuentan con una capacidad de producción de 200 unidades por semana. Asimismo se trabaja en talleres de panadería, herrería, zapatería, chapa y pintura”, dijo finalmente el ministro de Gobierno.

Detalles de la elaboración

El director del Servicio Penitenciario, José Luis Mondragón, hizo referencia al proceso de producción de los colchones y mencionó, “los trabajos se llevan a cabo en las instalaciones de la Unidad Penal, en el sector de talles industriales. Allí se realizan tareas en cuanto a los procesos de elaboración del producto tales como el espumado, corte y confección final del colchón”.

Y añadió: “Para eso contamos con el asesoramiento de un ingeniero químico, que es el responsable de dirigir el proceso de elaboración previa. En cuanto a las restantes tareas, están a cargo de 15 internos que fueron capacitados oportunamente”.
“Para el Servicio Penitenciario es un proyecto muy significativo porque no solo hemos puesto la fuerza de trabajo, sino también significó refuncionalizar espacios y lugares que antes estaban completamente ociosos y hoy se encuentran remodelados por completo. Se trabaja a pleno en algo que beneficiará al Servicio Penitenciario sino a otros entes del Estado”, precisó por último Mondragón.

Participó además de la jornada la secretaria General del Ministerio de Gobierno, Lucila Haidar.

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