El Área de la Mujer, de la Municipalidad de Colón, en articulación con el Centro de Salud del barrio San Francisco, desarrolló la primera charla de sensibilización programada entre las diversas acciones que se realizarán durante el mes de noviembre por el Día Internacional de la no violencia contra la mujer.

Esta charla tuvo como fin el de generar conciencia entre las asistentes a las charlas sobre estas cuestiones, continuando con las políticas públicas que se desarrollan en la ciudad, para enfrentar esta problemática social.

Mitos e ideas erróneas

– Las mujeres violentadas sólo representan un pequeño porcentaje de la población.

– Las mujeres violentadas son masoquistas.

– Las mujeres de clase media alta no son agredidas con tanta frecuencia o con tanta violencia como lo son las mujeres pobres.

– Las mujeres son violentadas porque se comportan mal o porque están locas.

– Las creencias religiosas evitan las agresiones.

– Las mujeres violentadas no tienen educación formal o carecen de destrezas para trabajar.

– Los agresores son violentos en todas sus relaciones.

– Los agresores no tienen éxito y carecen de recursos para enfrentarse a la vida.

– Las bebidas alcohólicas y las drogas son las principales causas del comportamiento agresivo.

– Los agresores son en su mayoría enfermos mentales.

– La policía siempre protege a las mujeres violentadas.

– Los agresores no son compañeros cariñosos.

– Los hombres que golpean a sus esposas o convivientes también golpean a sus hijas e hijos.

– Si una mujer está en una relación de agresión, no debe salirse de ésta.

– Las mujeres agredidas merecen la violencia.

– Los agresores dejan de ser violentos cuando se casan.

– Los hombres tienen derecho a castigar y a corregir a las mujeres.

Realidades

– A las mujeres no les gusta que las violenten y las agredan bajo ninguna circunstancia.

– La violencia se ejerce en todos los sectores sociales, aunque se reporta con menos frecuencia en los sectores medios y altos.

– Las mujeres son golpeadas no importando cuál es su conducta o su estado emocional.

– Los hombres que son muy religiosos también son agresores de sus esposas o compañeras.

– Las mujeres con mayor educación también están expuestas a ser violentadas por sus parejas.

– Los hombres agresores pueden tener doble cara, y ser amables en sus relaciones sociales y de trabajo.

– Existen agresores con éxito en todas las profesiones.

– Las bebidas alcohólicas y las drogas pueden reforzar la agresión, pero no son su causa y no deben ser excusa para la agresión.

– La gran mayoría de los agresores son hombres comunes y corrientes, sin problemas mentales.

– La protección policial está casi siempre muy limitada.

– Los agresores, según el ciclo de la violencia, con frecuencia se muestran arrepentidos y cariñosos después del abuso.

– Los agresores con mayor frecuencia abusan de sus esposas o convivientes. Aunque muy a menudo, agreden también a sus hijas e hijos.

-Las mujeres agredidas pueden romper con relaciones de agresión y violencia.

– Las relaciones de violencia pueden cambiar y mejorar con el tiempo.

– Sin ayuda externa, la violencia tiende a repetirse.

– No hay justificación para que exista la violencia contra las mujeres bajo ningún contexto o circunstancia.

– Con el matrimonio o la convivencia, la violencia generalmente aumenta.

– Los hombres no son seres superiores y las mujeres no son cosas de su propiedad, por lo tanto no tiene derecho a castigarlos.

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