Según la Asociación Latinoamericana de Medicina del Sueño, el 65% de la población, independientemente de la edad, experimenta trastornos del sueño. Aquí algunos consejos pueden ayudar a mejorar tanto la calidad como la cantidad de horas que dormimos:

Acostarse y levantarse siempre a la misma hora.
No dormir durante el día.
Hacer ejercicio, diariamente, a primera hora del día. Evitar realizar actividad física justo antes de la hora de ir a dormir.
Al momento de acostarse, practicar alguna actividad relajante como escuchar música suave, leer, etc. También puede ayudar tomar un baño caliente.
No comer en abundancia antes de acostarse.
No irse a dormir con hambre.
Un vaso de leche tibia también puede ayudar a conciliar el sueño, si se toma antes de acostarse.
Tomar cafeína sólo por la mañana y en cantidades limitadas.
Mantener la habitación en condiciones óptimas para dormir: sin ruido ni exceso de luz.
Dormir con ropa cómoda que no moleste ni apriete.