Dolor en la región cervical, limitación en la movilización de la cabeza, cefaleas, dolor en la región del músculo esternocleidomastoideo y rigidez, son algunos de los síntomas que puede presentar la tortícolis. Para evitar que esta aparezca, tenga en cuenta:

Evitar posturas forzadas en contracción o en híper flexión/extensión del cuello por tiempos prolongados (teléfono, computadora, almohadas altas, auto sin apoya cabeza, etc.).

Equipar los ambientes laborales con sillas de respaldo alto y con apoya brazos.

No permanecer más de 20 minutos en una misma posición sin ponerse de pie y elongar aunque sea 2 minutos.

A la hora del descanso, utilizar almohadas bajas.

Elegir actividades físicas aeróbicas y sin impacto. Están contraindicados los saltos, correr en superficies duras y los rebotes.

Tener cuidado con los masajes: Muchas veces, pueden causar alivio mediato y hasta efecto placentero, pero no son terapéuticos. Incluso, en algunas ocasiones cuando el proceso inflamatorio es importante, puede aumentar el mismo, prolongado el dolor.

Jamás “hacer sonar el cuello” con una persona inexperta: La movilización de la columna cervical está totalmente contraindicada si no la realiza un profesional.